Sinònimos: Distrofinopatía de Duchenne y Becker

Prevalencia: 1-9 / 100 000

Herencia: Recesivo ligado al X

Edad de inicio o apariciòn: Infancia

 

Resumen

Las distrofias musculares de Duchenne y Becker (DMD y DMB) son enfermedades neuromusculares caracterizadas por atrofia y debilidad musculares progresivas, como consecuencia de la degeneración de los músculos esqueléticos, lisos y cardíacos.

La DMD es más frecuente, temprana y grave que la DMB. La incidencia de la DMD es de 1 por cada 3.300 nacimientos de varones. La incidencia de la DMB varia entre 1 por cada 18.000 y 1 por cada 31.000 nacimientos de varones. Los niños afectados de DMD presentan habitualmente un inicio de la marcha retrasado. Las funciones cognitivas pueden estar alteradas.

El diagnóstico se realiza alrededor de los 5 años de edad, cuando los niños presentan «marcha de pato» y pie zambo con hipertrofia de pantorrillas (signo de Gowers positivo). La marcha se vuelve imposible entre los 10 y 12 años de edad. De forma progresiva aparece escoliosis, cardiomiopatía e insuficiencia respiratoria restrictiva. La DMB aparece más tarde, entre los 5 y 15 años de edad, con una deficiencia motora proximal de progresión variable. La afectación cardíaca puede ser un signo revelador de la enfermedad.

Existen otras formas clínicas: cardiomiopatía aislada, intolerancia al esfuerzo y formas sintomáticas de la distrofia muscular de Duchenne et Becker de la mujer portadora (ver estos términos). Estas enfermedades, de herencia recesiva ligada al X, están provocadas por un déficit de distrofina en el músculo esquelético y cardíaco, que conduce a una necrosis progresiva. El gen de la distrofina (DMD) está situado en Xp21.2 y codifica para varias isoformas. Las correlaciones genotipo-fenotipo se están estudiando actualmente.

El diagnóstico clínico se confirma por diferentes métodos. El nivel de creatina-fosfoquinasa es de 50 a 200 veces (DMD) o de 10 a 35 veces (DMB) superior al normal. La biopsia muscular muestra signos de distrofia (fibras necróticas y en regeneración). Los estudios inmunohistoquímicos revelan ausencia total de distrofina en la DMD y cantidad y/o calidad anormal de distrofina en la DMB. El análisis molecular muestra frecuentemente deleciones del gen DMD.

El diagnóstico diferencial debe incluir las sarcoglicanopatías (ver este término). El rastreo de mujeres portadoras en la familia es indispensable.

El diagnóstico prenatal necesita un diagnóstico molecular del caso índice lo más preciso posible. El tratamiento es sintomático y pluridisciplinar: ortopédico (prevención y tratamiento de las retracciones, fisioterapia, prótesis, artrodesis vertebral (a la edad de 12-15 años) y soporte técnico), respiratorio (prevención y tratamiento de las infecciones, fisioterapia respiratoria y ventilación), y cardíaco (IECA y cardioprotección). La corticoterapia ayuda a estabilizar las funciones motoras. La integración escolar y social es esencial (papel de las asociaciones de pacientes). La evolución de la DMD es grave, con insuficiencia cardiorrespiratoria terminal en pacientes jóvenes; mientras que en la DMB es más lenta, con una esperanza de vida normal o por debajo de lo normal. Se están estudiando varías líneas de investigación: ensayos de terapia celular, estudios de terapia génica (exon-skipping, etc.) o estudios del efecto de la glutamina.

 

Revisores expertos

  • Chritophe BOULAY
  • Pr Brigitte CHABROL

 

 


Fuente: http://www.orpha.net/consor/cgi-bin/Disease_Search.php?lng=ES&data_id=55&Disease_Disease_Search_diseaseGroup=Distrofia-muscular-de-Duchenne-y-Becker&Disease_Disease_Search_diseaseType=Pat&Enfermedade%28s%29/grupo%20de%20enfermedades=Distrofia-muscular-de-Duchenne-y-Becker&title=Distrofia-muscular-de-Duchenne-y-Becker&search=Disease_Search_Simple